Qué ilusión visitar a un charcutero de raza. Digo esto porque un lugar que lleva tantos años en la brecha debe de ser por qué hacen las cosas más que bien. ¿No os parece?
Tres generaciones de charcuteros, proveedores y clientes. Me cuenta, un pequeño comercio, grande en calidad. Por el que los años pasan ganando en sabiduría.
Situados en la calle Alameda San Mamés 2, están especializados en ibéricos de Salamanca producto de Juan Manuel al que visitan, para realizar una selección de los mejores jamones y embutidos.
En comercios de esta solera puedes entrar y salir con todas las viandas necesarias. Porque nos surten de todo lo necesario para reponer nuestras despensas y neveras.
La unión de grandes, pequeñas marcas como “conservas rosara”, siendo un punto de encuentro ya que compras en su tienda online pero lo recoges en tienda física. Una gran idea.
Astobiza un txakoli muy nuestro y su innovadora ginebra con botánicos de eneldo, de nuestra zona.
Quesos curiosamente de pastora ”izoria” y su magnífica miel. Un queso de Marquina de la quesería Santa Mañe ganador de Santo Tomás. Quesos franceses para los más sibaritas hasta 35 como un brie de búfala. ¡¡Es el paraíso de los ratones de dos patas!!
Legumbres del país, garbanzo pedrosillano, lentejas pardinas y ahora también mijo para los más sanotes, vinos de bodegas pequeñas, de denominaciones de Duero, Campo de Borja. Vinos Argentinos, Europeos…
Productos propios de charcutería como huevos de label, pollo, pavo, lomo.
Comidas preparadas, le eché el ojo a un codillo magnífico que terminó en mi bolsa.
Una gran selección gourmet en un pequeño espacio.
Como podéis comprobar hay de todo y para todos. Personas y gustos.
Para mí es un placer esta colaboración con BilbaoCentro. Conocer comerciantes con quién charlar, entre cliente y cliente. Cuando ellos mismos, te dicen que es un placer acercarse, hacer la compra al pequeño comercio.
Comprar un lomo adobado en casa con la receta del adobo de la abuela.
El mérito de la lucha diaria frente al mostrador, con la sonrisa y también la preocupación de agradar para seguir en la brecha mucho más frente a la competencia desleal en muchos casos de las grandes superficies.
Yo, ya sabéis soy defensora del pequeño quién lucha con uñas y dientes, cómo se decía antes.
Todos podemos, parece un eslogan político pero es la gran verdad.
Lo dicho un placer para paladeabilbao visitar y charlar con Charcutería San Mamés.
Dos pequeños, haciendo algo grande. Hasta pronto!!